La palabra práctico lleva tilde cuando es pronunciada con vocal tónica en la «a».
Las palabras esdrújulas siempre llevan tilde.
Análisis: por qué práctico lleva tilde.
Analicemos paso por paso el motivo por el que práctico lleva tilde. Este proceso está también explicado con más detalle en el libro de LlevaTilde, donde puedes aprenderlo fácilmente.
Separación silábica
El primer paso para determinar si una palabra lleva tilde es separar sus sílabas, que son los sonidos articulados en torno a una vocal en los que se divide una palabra. La separación silábica de práctico es:
prác - ti - co
Por lo tanto, la palabra práctico está formada por 3 sílabas.
Clasificación por tipo de palabra
El siguiente paso es determinar sobre qué sílaba recae la vocal tónica en la «a». La sílaba tónica es la antepenúltima de un total de 3 sílabas. Por lo tanto, práctico es una palabra esdrújula.
Aplicación de reglas
Las reglas sobre tildes dicen que:
Las palabras esdrújulas siempre llevan tilde.
Conclusión
La palabra práctico, pronunciada con vocal tónica en la «a», lleva tilde.
Análisis morfológico
Práctico es un adjetivo calificativo masculino singular.
Ejemplos de práctico con tilde
«Que, de ejercicio práctico, todos (esto incluye a los profes) vinieran al cole como alumnos los fines de semana.» —María Frisa en ¡abajo el cole! (¡abajo el cole! 1).
«Nació en un hogar peculiar: el conformado, con aparentemente envidiable armonía, por un liberal enérgico, más práctico que brillante, don Máximo Péguy, y una católica mansa y tenaz, doña Regina O’Dojherty.» —Tomas De Mattos en ¡bernabé, bernabé!.
«Incluso empezó a parecerles muy práctico que las uvas que se les caían acabaran rodando todas al mismo rincón.» —Isabel Bogdan en ¡cuidado con el pavo real!.
«Me encantó el libro porque, entre muchas cosas, da al lector, como decía mi abuela: “El remedio y el trapito”; es decir, una idea, una reflexión, una dirección, y el consejo práctico para aplicarlo en la realidad.» —César Lozano en ¡despierta!... que la vida sigue.
«En consecuencia, se determinó que un curso práctico en la mejor academia de labores de aguja de Londres era lo más adecuado para ella.» —Jennifer Worth en ¡llama a la comadrona!.
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