¿Lleva tilde ortiz?
La palabra ortiz no lleva tilde cuando es pronunciada con vocal tónica en la «i». Las palabras agudas no acabadas en «n», «s» o vocal no llevan tilde.
Análisis: por qué ortiz no lleva tilde.
Analicemos paso por paso el motivo por el que ortiz no lleva tilde. Este proceso está también explicado con más detalle en el libro de LlevaTilde, donde puedes aprenderlo fácilmente.
Separación silábica
El primer paso para determinar si una palabra lleva tilde es separar sus sílabas, que son los sonidos articulados en torno a una vocal en los que se divide una palabra. La separación silábica de ortiz es:
or - tiz
Por lo tanto, la palabra ortiz está formada por 2 sílabas.
Clasificación por tipo de palabra
El siguiente paso es determinar sobre qué sílaba recae la vocal tónica en la «i». La sílaba tónica es la última de un total de 2 sílabas. Por lo tanto, ortiz es una palabra aguda.
Aplicación de reglas
Las reglas sobre tildes dicen que:
- Las palabras agudas no acabadas en «n», «s» o vocal no llevan tilde.
Conclusión
La palabra ortiz, pronunciada con vocal tónica en la «i», no lleva tilde.
Ejemplos de ortiz sin tilde
- «Así eran los palacios Errázuriz, Alvear, Pereda, Ortiz Basualdo, Anchorena, Bosch, Larreta y otros más, edificados para la eternidad y que en menos de veinte años se convirtieron, con raras excepciones, en embajadas, ministerios o museos.» —María Sáenz Quesada en Los estancieros.
- «De Alvear, que Canning hace años cambió de nombre por Scalabrini Ortiz, y que insistimos en bautizarlas como se nos antoja, a pesar del ex presidente y del escritor que con su avenida está solo y espera.» —Germinal Nogués en Buenos aires, ciudad secreta.
- «El Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires cuenta con la Dirección de Higiene, organismo que recibe las denuncias de existencia de ratas, Ortiz de Ocampo 2517.» —Germinal Nogués en Buenos aires, ciudad secreta.
- «A las amistades surgidas de los grupos de estudio, Orfilia Polemann, Jorge Anitua, Juan Carlos Balduzzi, Donaldo Zoilo, Guillermo Ortiz, con quienes comparto estimulantes conversaciones.» —Juan José Sebreli en La era del fútbol.
- «Los catamarqueños apenas habían bostezado cuando el 20 de febrero del 38 Roberto Marcelino Ortiz asumió la presidencia de la Nación y el catamarqueño Ramón Castillo, la vicepresidencia.» —María Seoane en El burgués maldito.